Ahora que ya no estás aquí
¡ tu presencia es tan real !
Recuerdo la experiencia de acompañarte en este proceso de pintar el desierto que tú imaginaste en el juego de metáforas al que jugamos y que con tanta determinación y seguridad querías pintar.
Recuerdo tus ganas de pintarlo a pesar de que tenías la creencia de que no iba a haber nada en un desierto pero que tanto te apetecía.
Fue un encuentro de mucha paz y satisfacción para tí Conchi
y de un gran recuerdo para mí
y de un gran recuerdo para mí